Con telescopio ubicado en Chile: Descubren "objeto interestelar" viajando a toda velocidad a través del Sistema Solar


Detectado cerca de la Tierra, este objeto a 214.000 km/h ofrece claves sobre la formación de sistemas planetarios lejanos.
(CNN) - Un cometa jamás visto en nuestro sistema solar desató entusiasmo global entre astrónomos. Identificado como 3I/ATLAS, se confirmó como el tercer objeto interestelar observado en la vecindad cósmica terrestre, tras ‘Oumuamua (2017) y 2I/Borisov (2019). El telescopio ATLAS de la NASA, en Chile, realizó el hallazgo, y observaciones archivadas revelaron que el cuerpo celeste proviene de la constelación de Sagitario.
Características únicas
La trayectoria rectilínea y su velocidad de 214.364 km/h —casi 60 km por segundo— descartaron un origen dentro del sistema solar. "Los objetos locales siguen órbitas elípticas o circulares, pero este trazó una línea casi perfecta", explicó Teddy Kareta, astrofísico de la Universidad de Villanova. Paul Chodas, director del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA, añadió que cálculos retrospectivos indican que viajó millones de años por el espacio interestelar antes de ingresar a nuestro sistema.
Con un diámetro estimado de 20 kilómetros, 3I/ATLAS supera en brillo y velocidad a sus predecesores interestelares. Aunque muestra actividad cometaria —pérdida de masa al acercarse al Sol—, aún se desconoce qué materiales libera. Kareta subrayó que su procedencia desde el centro galáctico de la Vía Láctea lo hace especialmente valioso: "Queremos compararlo con cometas locales para responder preguntas sobre otros sistemas estelares".
Ruta segura y ventana de observación
El cometa no amenaza la Tierra. Pasará a 240 millones de kilómetros de nuestro planeta, con su máximo acercamiento al Sol el 30 de octubre (210 millones de km). El 2 de octubre, rozará Marte a 30 millones de km. Visible desde el hemisferio sur en la constelación de Sagitario, la luna llena del 10 de julio dificultará su avistamiento, pero telescopios pequeños podrán rastrearlo mejor en agosto.
Según Gianluca Masi, fundador del Virtual Telescope Project, seguirá observable hasta septiembre, desaparecerá tras el Sol y reaparecerá en diciembre, con seguimiento posible hasta mediados de 2026.
Astrónomos de todo el mundo priorizan su estudio. "Grandes telescopios ya lo enfocan", destacó Kareta. La misión: descifrar si los bloques formativos de planetas en sistemas lejanos se asemejan a los nuestros.