Los hombres son tres veces más propensos a cometer infracciones de tráfico que las mujeres

Un estudio, publicado en Sociology of power, y realizado por Anton Kazun, profesor asistente en la Facultad de Ciencias Económicas de la HSE, y Mikhail Belov, asistente de investigación, ha demostrado que los hombres tienen tres veces más probabilidades que las mujeres de cometer infracciones de tráfico y de estar involucrados en accidentes que terminan en casos criminales.

El análisis, basado en más de 160,000 decisiones judiciales emitidas en Rusia entre 2010 y 2022, revela que en más del 90% de los casos, los acusados son hombres.

Después de ajustar las cifras considerando que solo el 22% de las mujeres en Rusia conducen en comparación con el 68% de los hombres, la investigación muestra que los conductores masculinos siguen siendo 3.25 veces más propensos a estar involucrados en accidentes graves,

Entre las causas más comunes, destacan la conducción bajo los efectos del alcohol y el comportamiento agresivo en la carretera, factores que resultan en situaciones de alto riesgo.

Los investigadores sugieren que las diferencias de género en la socialización y las actitudes hacia la conducción podrían explicar estos resultados. Los hombres, en promedio, conducen más rápido y cubren mayores distancias que las mujeres, lo que incrementa la probabilidad de accidentes.

Además, en los casos de infracciones relacionadas con el alcohol, los hombres representan una cuarta parte de las condenas, mientras que solo el 10% de las mujeres fueron acusadas de lo mismo.

A nivel regional, existen variaciones en la brecha entre hombres y mujeres al volante. En grandes ciudades como Moscú o San Petersburgo, las mujeres conducen con mayor frecuencia y la diferencia en el número de accidentes entre ambos géneros es menor.

Sin embargo, en regiones como Daguestán o Chukotka, la probabilidad de que los hombres se vean involucrados en accidentes es hasta 20 veces mayor.

Según reportó Eurekalert, Kazun concluye que mejorar la seguridad vial pasa por fomentar una conducción más cuidadosa entre los hombres y que, si más mujeres tomaran el volante, los estándares de seguridad podrían aumentar considerablemente.