Las 'arañas hippies' desafían el concepto de personalidad animal: No tendrían conductas fijas, sorprendiendo a científicos


Una investigación internacional demostró que estas arañas africanas cooperativas no mantienen rasgos conductuales fijos, desmontando teorías previas sobre roles sociales estables en especies animales.
Las arañas sociales africanas (Stegodyphus dumicola), apodadas "hippies" por su estilo de vida colaborativo, carecen de personalidades definidas, según un estudio publicado en Animal Behaviour. Tras cuatro meses de observación, científicos de la Universidad de Portsmouth y otras instituciones europeas descubrieron que sus comportamientos variaban drásticamente con el tiempo, cuestionando métodos tradicionales para evaluar rasgos animales.
La falacia de las etiquetas
El equipo monitoreó 28 colonias midiendo audacia, reacción a amenazas y eficacia en caza grupal. "Las arañas que parecían tímidas un día actuaban con audacia semanas después", explicó la Dra. Lena Grinsted, líder del estudio. Esta flexibilidad, influida por factores como el hambre o el entorno, demostró que las clasificaciones rígidas (como 'agresivas' o 'cautelosas') eran inexactas cuando se basaban en observaciones breves.
Investigaciones anteriores sugerían que estas arañas —que comparten presas y crían colectivamente a sus hijos— desarrollaban roles fijos, similar a hormigas o abejas. Sin embargo, el nuevo análisis reveló una sociedad sin jerarquías, donde cada individuo adaptaba su conducta a las necesidades del grupo. "Es una cooperación genuinamente igualitaria", destacó Grinsted.
Implicaciones para la ciencia del comportamiento
El estudio criticó la tendencia a extrapolar personalidades animales con pocos datos. "Juzgar a una araña por pruebas de dos días es como definir a una persona por un gesto", comparó la investigadora. El equipo urgió a prolongar los periodos de observación y considerar la plasticidad conductual como norma, no como excepción.
Colaboradores de Dinamarca, Francia y Alemania coincidieron en que estos hallazgos obligan a replantear teorías evolutivas. Si las arañas más "audaces" no mantenían esa cualidad, ¿cómo afecta esto a la selección natural de rasgos? La respuesta, según Grinsted, yace en estudiar ciclos vitales completos, no instantáneas conductuales.
Estas "hippies" de ocho patas no solo desafían el antropomorfismo, sino que reescriben las reglas de la sociabilidad animal. Su lema parece ser: sin roles, sin etiquetas, solo adaptación pura.