La gripe aviar llega a la Antártida: una nueva amenaza para las especies únicas del Hemisferio Sur

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José Ferrada 10-09-2024
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El virus H5N1, que ha devastado poblaciones de aves y mamíferos en todo el mundo, ha sido detectado en la región subantártica, poniendo en peligro ecosistemas únicos y especies vulnerables como los pingüinos y albatros.


La gripe aviar altamente patógena (H5N1) ha alcanzado las regiones subantárticas, una de las últimas zonas del planeta en resistir la propagación de este virus mortal.

Científicos del British Antarctic Survey (BAS) han confirmado, a través de un estudio publicado en Nature Communications, la presencia del virus en aves y mamíferos en las Islas Georgias del Sur, lo que representa una grave amenaza para la fauna local.

Desde 2021, el clado 2.3.4.4b del H5N1 ha afectado a aves y mamíferos en todo el mundo, propagándose desde Europa a América del Norte y del Sur.

Ahora, el virus parece estar filtrándose hacia la Antártida, llevado por aves migratorias, según los investigadores.

En septiembre de 2023, los primeros signos de la enfermedad fueron detectados en un petrel gigante en las Georgias del Sur.

Poco después, otras especies de aves y mamíferos como los lobos marinos antárticos comenzaron a mostrar síntomas, y varios animales murieron.

La llegada de este virus a la región subantártica podría tener consecuencias devastadoras para especies como los albatros y pingüinos, que ya enfrentan otros desafíos ambientales. Los expertos temen que una pandemia animal pueda acabar con poblaciones enteras, alterando el frágil equilibrio de los ecosistemas locales.