La ciencia revela los reales "asesinos invisibles" del ejército de Napoleón cuando invadió Rusia


Análisis de ADN dental identifica bacterias de fiebre paratifoidea y recurrente como responsables clave de las muertes masivas durante la retirada de 1812, desafiando diagnósticos históricos de tifus.
La catastrófica retirada de Napoleón de Rusia en 1812, donde perecieron 300,000 soldados, tuvo culpables microscópicos recién identificados. Un equipo de la Universidad Paris Cité analizó el ADN dental de 13 soldados encontrados en fosas comunes en Vilna, revelando la presencia de dos bacterias letales: Salmonella enterica y Borrelia recurrentis.
Estos patógenos, transmitidos por agua contaminada y piojos corporales respectivamente, debilitaron fatalmente a las tropas ya exhaustas por el frío y el hambre.
Hallazgos que reescriben la historia
El estudio, publicado en bioRxiv, contradice los registros médicos de la época que atribuían las muertes principalmente al tifus. "La fiebre recurrente por piojos no siempre mataba, pero era el golpe final para hombres al límite", explicó el microbiólogo Rémi Barbieri, líder de la investigación, según reportó Science Alert. Los soldados analizados, enterrados con sus uniformes y caballos pero sin armas, murieron por enfermedad, no en combate.
Barbieri advirtió que el tifus podría haber afectado a otros soldados, ya que solo examinaron 13 de los más de 3,000 cuerpos descubiertos en 2001. Expertos independientes coinciden en que múltiples patógenos probablemente actuaron en conjunto durante la retirada.
Un cóctel mortal de factores
El estudio describe un escenario donde el frío extremo, la desnutrición y las infecciones concurrentes crearon condiciones imposibles de sobrevivir. "Estos hombres enfrentaron una tormenta perfecta de amenazas", señaló Barbieri.
El equipo enfatizó la necesidad de analizar más muestras para comprender el espectro completo de enfermedades que diezmaron al ejército.