Eliminar por completo el alcohol reduce significativamente el riesgo de cáncer de mama, según nuevo estudio


Investigación internacional revela que la abstinencia alcohólica, junto con dieta saludable y ejercicio, puede prevenir hasta el 8% de casos de este cáncer en mujeres.
El consumo de alcohol, incluso en cantidades moderadas, aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de mama, según un informe del Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer (WCRF). La revisión científica, que analizó datos de 2.3 millones de casos diagnosticados en 2022, recomienda la abstinencia total de alcohol como medida preventiva clave junto con mantener un peso saludable y una dieta rica en vegetales.
Cambio de paradigma en las recomendaciones
Mientras las guías británicas permiten hasta 14 unidades de alcohol semanales, el estudio demuestra que cada trago incrementa el peligro. "El alcohol afecta la salud en todos los niveles de consumo", advirtió el Dr. Richard Piper de Alcohol Change UK. La investigación revela que el 8% de los casos de cáncer de mama se vinculan directamente con el consumo de bebidas alcohólicas.
El informe, desarrollado por universidades de Harvard y las Islas Baleares, identifica cuatro pilares preventivos: actividad física regular, dieta basada en plantas, reducción de carnes procesadas y eliminación de tabaco y alcohol. "Seguir estas pautas de forma integral ofrece la mayor protección", explicó la Dra. Dora Romaguera, coautora del estudio, según reportó The Guardian.
Estos hallazgos desafían las recomendaciones actuales y podrían impulsar cambios en las políticas públicas, incluyendo advertencias más claras en el etiquetado de bebidas alcohólicas. Organizaciones como Cancer Research UK ya alertan que incluso una copa diaria eleva el riesgo, marcando un punto de inflexión en la comprensión de los factores evitables del cáncer de mama.