El impacto de la tecnología en la educación: Avances y desafíos según Ofer Malamud
El economista y profesor en Northwestern University, expuso en el Congreso Futuro 2025 que el acceso a dispositivos digitales puede ser contraproducente si no hay una guía adecuada.
La implementación de tecnología en la educación ha sido vista como una solución para mejorar el aprendizaje, pero los resultados han sido mixtos. Ofer Malamud, economista especializado en políticas educativas, presentó en el Congreso Futuro 2025 una serie de estudios que cuestionan la efectividad de esta estrategia.
Resultados dispares según el contexto
Malamud destacó el caso de Rumania, donde un programa entregó computadoras a niños de bajos ingresos. "Los estudiantes mejoraron sus habilidades digitales, pero sus calificaciones cayeron porque usaban los dispositivos principalmente para jugar en lugar de estudiar", explicó. En un caso similar en Perú, la distribución masiva de laptops no generó mejoras significativas en matemáticas o lenguaje.
Sin embargo, cuando la tecnología es implementada con supervisión y capacitación, los efectos pueden ser positivos. "Cuando los padres recibieron información sobre el uso de internet de sus hijos, se redujo el tiempo dedicado al entretenimiento digital", mencionó Malamud. Asimismo, un programa en Perú que capacitó a profesores en el uso de plataformas educativas mejoró el rendimiento en matemáticas de los alumnos.
La tecnología no sustituye la motivación y la interacción humana
El experto concluyó que, si bien la tecnología puede ser una herramienta útil, no reemplaza los factores humanos clave en la educación. "El aprendizaje es un proceso activo que requiere esfuerzo y compromiso, no basta con tener acceso a dispositivos digitales", enfatizó Malamud.