Su finalidad es preservar a las especies: Rusia planea prohibir la caza de delfines y ballenas
El gobierno ruso redactará un proyecto de ley para prohibir su pesca industrial y costera de estas especies. Además, señalan que bajo esta norma, los responsables de la “cárcel de ballenas” -ocurrió hace dos años- no quedarán exentos de responsabilidad.
Pese a que desde 1986 existe una prohibición internacional de caza comercial de ballenas, son varios los países que aún continúan con esta práctica, al igual que con la caza delfines, donde en Japón se realiza una casa anual en Taiji con fines de consumo humano o venta.
Son varias las organizaciones animalistas que han señalado que en el último siglo han muerto casi tres millones de ballenas y delfines. Estos animales estuvieron a punto de desaparecer debido a la industria que consume su grasa para convertirla en aceite y venden su carne para consumo humano.
Hace algunos días, el primer ministro de Rusia, Mijaíl Mishustin, anunció que el gobierno planea emitir una ley que busque prohibir la pesca industrial y costera para preservar a los delfines y ballenas antes que se extingan.
“Estamos preparando regulaciones adicionales, esta vez para la pesca industrial y costera. En primer lugar, se aplicará en particular a la de ballenas y delfines. El nuevo proyecto de ley prohibirá su captura”, señaló Mishustin en una reunión del Gabinete de Ministros.
Asimismo, indicó que cuando la medida se comience a implementar, la ley no dejará fuera a los responsables de la “cárcel de ballenas” que ocurrió hace dos años en la bahía de Srédniaya, en el Pacífico ruso, donde un centenar de orcas y belugas fueron recluidas en jaulas.
Los mamíferos habían sido capturados con el objetivo de ser vendidos a delfinarios chinos. Tras este hecho, el jefe de gobierno indicó que por instrucciones del Presidente Valdimir Putin, el gobierno decidió endurecer los requisitos para la caza de orcas y bellas con fines educativos.
Esta autorización debe ser acreditada por una comisión gubernamental, “este año no se ha concedido ni un solo permiso”, enfatizó Mishustin en un comunicado publicado en la página web del gobierno ruso.