Estudio descubre que los “apagones” alcohólicos duplican el riesgo de padecer demencia

Futuro 360 10-09-2020
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Un trabajo publicado en Jama Network Open demostró que independiente de la frecuencia del consumo de una persona, si ésta pasa por un cuadro alcohólico neurotóxico los riesgos pueden ser igual de graves que un bebedor habitual.


No es recomendable ni tampoco seguro, aún así, cuando ciertas personas beben hasta literalmente desmayarse, podrían estar causando un daño irreversible a su cuerpo y, según demostró una nueva investigación, su cerebro. 

Una revisión masiva de investigaciones previas que examinaron la historia con la bebida de 130.000 personas sugiere que quedar completamente ebrio podría duplicar el riesgo de padecer demencia en las últimas etapas de la vida. 

Mientras las asociaciones entre el consumo excesivo de alcohol y la demencia están bien documentados, aún queda mucho por saber de cómo este tipo de bebidas contribuye a los mecanismos detrás del declive cognitivo. 

Inclusive, los vínculos han sido bien observados en numerosos estudios, pero mientras el territorio ha sido bien explorado no significa que no existan nuevas formas de aproximarse a la información. 

Una limitación significativa en los estudios existentes, los cuales tienden a analizar los efectos en términos de niveles de consumo de alcohol promedio a través del tiempo, es la falta de consideración de los patrones del beber del común de las personas. 

Por ejemplo, es bastante diferente tomar 14 tragos en una noche que en 14 noches diferentes.

“El consumo de altas cantidades de alcohol en un corto periodo de tiempo puede conducir a niveles neurotóxicos de alcohol en la sangre, a pesar de que dichos episodios no se reflejan completamente en los niveles de consumo promedio”, aseguró Mika Kivimaki, de la Universidad de Londres, explica en un nuevo reporte.

“Es por esto, que tanto los niveles moderados de consumo general podrían combinarse con episodios específicos de abuso de alcohol, lo que podría conducir a efectos graves en el sistema nervioso central, tales como la pérdida de conciencia”, agregó. 

De acuerdo a Kivimaki y sus colegas, el legado de los “apagones” inducidos por los efectos neurotóxicos del alcohol no han sido lo suficientemente examinados en el contexto de los factores de riesgo de la demencia, por lo que los investigadores indagaron en estudios previos de Inglaterra, Francia, Suecia y Finlandia. 

Si bien no todos los participantes reportaron “apagones”, más de 96.000 personas lo hicieron y cerca de 10.000 aseguraron haber experimentado un cuadro similar en los 12 meses previos al estudio. 

Cuando hicieron un seguimiento a los pacientes, una preocupante tendencia surgió.

“La pérdida de conciencia debido al consumo de alcohol fue asociada con una duplicación del riesgo de demencia subsecuente, independiente del consumo general de alcohol”, aseguraron los investigadores. 

El trabajo fue publicado en Jama Network Open