Encallamiento de ballenas en Australia: rescatistas lograron salvar a 108 especímenes
Los expertos aseguran que ya lograron rescatar a todos los cetáceos que sobrevivieron en el peor encallamiento de la historia de Australia. Ahora los esfuerzos se concentrarán en disponer, de la mejor forma, los cadáveres de los cientos de especímenes que perecieron en la catástrofe.
Un total de 108 calderones comunes (o ballenas piloto de aleta corta) fueron liberados en altamar luego de haber sido rescatados del encallamiento masivo que ocurrió en Australia, según afirmaron expertos marinos.
Creen que el Puerto de Macquarie, ubicado en la costa occidental de Tasmania, está libre de ballenas vivas. Sin embargo, cerca de 350 habrían muerto, en lo que se transformó en el peor encallamiento de la historia del gigante polinésico.
Ahora la atención se está enfocando en la disposición de los cadáveres, con 15 enterrados el pasado viernes para probar el método más efectivo de manejar los restos del desastre.
Una declaración liberada por el gobierno de Tasmania el pasado sábado, confirmó que un número no menor de especímenes lograron ser salvados.
Kris Carlyon, biólogo de vida silvestre del Programa de Conservación Marina de Australia, aseguró a la BBC que los resultados de los esfuerzos de rescate luego de cinco arduos días de trabajo realizados por el equipo de rescate, fueron más que satisfactorios.
Sin embargo, limpiar los cadáveres del puerto podría tomar una gran cantidad de días dependiendo del viento, las mareas y otras condiciones, según afirmaron declaraciones oficiales del gobierno.
“Ayer 15 ballenas fueron dispuestas en el mar para determinar si dicho método sería lo suficientemente efectivo”, agregó Rob Buck, Controlador de Incidentes y mánager del Servicio de Parques y Vida Salvaje de Australia.
“La recolección y deposición está llevándose a cabo con la asistencia de compañías acuicultoras, cuyos equipos y expertise han sido esenciales en el puerto para obtener un resultado efectivo y veloz”, agregó Buck.
Se ha pedido a los residentes locales alejarse del lugar mientras se están realizando las obras de remoción.