¿Por qué son así? La ciencia finalmente logra resolver el misterio genético de los gatos naranjas


Investigadores de Stanford y Kyushu identificaron la mutación específica que produce el característico pelaje anaranjado en felinos, tras analizar miles de muestras de ADN con ayuda de dueños y criadores.
El enigma genético detrás del color naranja en los gatos finalmente encontró respuesta gracias a dos estudios publicados en Current Biology. Equipos de la Universidad de Stanford y la Universidad Kyushu descubrieron que una mutación en el gen ARHGAP36 activa un mecanismo único que difiere del que produce pelajes rojizos en otros mamíferos.
Greg Barsh, genetista de Stanford y autor principal, explicó que la clave radicó en un pequeño fragmento de ADN ausente cerca del gen mencionado. "Esta mutación altera una vía molecular fundamental, no solo para el color del pelaje sino potencialmente para otros procesos biológicos", señaló. El hallazgo culminó una investigación de más de una década que involucró el análisis de 3.000 muestras de ADN felino.
Ciencia colaborativa con amantes de los gatos
El estudio destacó por su metodología participativa. Christopher Kaelin, coautor de Stanford, describió cómo dueños y criadores facilitaron muestras mediante hisopados bucales durante exposiciones felinas en tres continentes. "La comunidad de entusiastas de gatos demostró ser un aliado invaluable. Su interés permitió acceder a una diversidad genética que hubiera sido imposible obtener solo en laboratorios", afirmó, según reportó The Guardian.
Las muestras revelaron que la mutación afecta células pigmentariqqas de forma distinta a los mecanismos conocidos en humanos o perros. Esto explicó por qué los gatos naranjas heredan su coloración mediante patrones únicos, un misterio que intrigó a científicos por más de un siglo.
Barsh enfatizó que el proyecto fortaleció la conexión entre ciencia y sociedad: "Mostramos cómo la genética responde preguntas cotidianas que interesan al público". El equipo continuará investigando aplicaciones de este hallazgo en otros campos de la biología, mientras celebra haber resuelto uno de los enigmas más curiosos de la felinidad.