Más allá del estrés: Estudio descubre conexiones genéticas entre el intestino y los trastornos psiquiátricos
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Pese a que aún queda mucho por explorar, este estudio podría allanar el camino para investigaciones más profundas que aclaren cómo los problemas intestinales podrían contribuir al desarrollo de enfermedades psiquiátricas.
En un avance científico emocionante, investigadores han identificado vínculos genéticos entre el síndrome del intestino irritable (SII) y los trastornos psiquiátricos, como la esquizofrenia, la enfermedad bipolar, la depresión y la ansiedad.
Este descubrimiento arroja nueva luz sobre la relación entre el intestino y el cerebro, y podría allanar el camino para tratamientos más efectivos del SII, una enfermedad gastrointestinal que afecta a millones de personas en todo el mundo.
SII es una afección que afecta aproximadamente al 10 por ciento de la población mundial, provocando síntomas como dolor abdominal, estreñimiento y diarrea, y disminuyendo la calidad de vida de quienes lo padecen.
Un paso hacia la comprensión del rol del sistema nervioso
Más de algún científico ha manifestado como el cerebro es capaz de influenciar nuestros órganos, somatizando nuestras preocupaciones. Para comprender esto más a fondo, investigadores del Centro NOTMENT y las universidades de Bergen y Oslo analizaron nuevos métodos estadísticos para encontrar una conexión entre el intestino y nuestro cerebro.
Analizando a pacientes con trastornos psiquiátricos y quienes padecen SII, identificaron que 116 nuevos locus de riesgo genómico asociados con SII, mientras que 70 loci únicos se comparten entre el SII y diversos trastornos psiquiátricos, incluyendo trastorno de ansiedad generalizada, depresión mayor, enfermedad bipolar y esquizofrenia.
Estos datos demostraron una base genética común entre las enfermedades gastrointestinales y psiquiátricas, brindando una visión más profunda de cómo se interrelacionan estos sistemas complejos.
En términos simples, esto significa y sugiere que la interacción entre el intestino y el cerebro podría ser mediada en parte por estos genes compartidos, expandiendo nuestra comprensión de la biología subyacente a estas condiciones.
Perspectivas para el futuro
Aunque queda mucho por explorar, estos emocionantes hallazgos podrían allanar el camino para investigaciones más profundas que aclaren cómo los problemas intestinales podrían contribuir al desarrollo de enfermedades psiquiátricas.
El equipo de investigación espera que sus descubrimientos estimulen investigaciones experimentales y, en última instancia, conduzcan al desarrollo de tratamientos más efectivos para el SII y posiblemente otras condiciones psiquiátricas.
La investigación fue publicada en la revista Genome Medicine.